Recetas saludables y muy veraniegas

No sé si os habréis dado cuenta de que en verano la apetencia por los alimentos disminuye drásticamente y esto se traduce en una menor sensación de hambre durante todo el día que, si no tenemos cuidado puede acarrear una malnutrición a medio-largo plazo. Si notáis que no sentís hambre a lo largo del día, que llega la hora de comer y aunque sea una de vuestras comidas favoritas no os apetece, que os cansáis rápidamente de comer o incluso que sentís náuseas cuando coméis más de lo que el cuerpo pide en ese momento y todo esto coincide con épocas de bochorno (si os pasa el resto del año os recomiendo que os pongáis en manos de un especialista), no os preocupéis que es lo propio de estos climas.

Esto se debe a que en verano disminuye el metabolismo basal, ya que las funciones de generar calor en el organismo sobran y todos los mecanismos empleados están encaminados a disminuir la temperatura corporal (algo muy difícil cuando la temperatura ambiental no acompaña) y entre estos mecanismos se encuentra la disminución del apetito (la metabolización de los alimentos genera mucho calor, he aquí el motivo de evitar las comidas copiosas en esta época ya que podríamos sufrir un corte de digestión).

Y aunque el verano tiene sus días contados todavía podemos aprovechar lo que queda para purificar nuestro organismo, ¿cómo? muy sencillo, con batidos de frutas y hortalizas caseros, la mejor receta para alimentarnos e hidratarnos en esta época tan calurosa. Los beneficios de estos cócteles son numerosos ya que aportan una amplia colección de vitaminas y de minerales: efectos antioxidantes (para combatir, por ejemplo, los efectos nocivos del sol), diuréticos (evitan la retención de líquidos), regulan el tránsito intestinal, hidratan, previenen la fatiga, activan el sistema circulatorio, depuran la sangre, mejoran la eliminación de toxinas, fortalecen las defensas...

Con respecto a las recetas sólo existe un límite: vuestra imaginación. Podéis mezclar y combinar frutas y hortalizas a vuestro antojo y el resultado será exquisito. Como ejemplos: gazpacho de cereza, sopa de tomate, sopa fría con pimiento rojo, zumo de fresas con naranja, zumos tropicales, macedonias y brochetas de frutas, granizados y un largo etc. Todo esto con la gran ventaja de que ninguno lleva azúcar (son dulces de por sí) y se pueden tomar a cualquier hora sin miedo de pasarnos con el aporte energético diario. ¡Qué aproveche!